Los viejos aparatos de refrigeración, como frigoríficos, aparatos de aire acondicionado y espumas utilizadas para aislar edificios, suelen contener refrigerantes o agentes químicos soplantes con gases fluorados. Estos bancos de «SAO» generan una elevada producción de emisiones perjudiciales para el clima. El proyecto ayuda a sus socios a establecer procedimientos de recuperación, recogida y eliminación de las SAO. Como primer paso, se llevan a cabo análisis de las condiciones marco, los instrumentos políticos y un inventario de los bancos de SAO. A partir de ahí, el proyecto formula hojas de ruta nacionales que incluyen recomendaciones sobre medidas políticas, mecanismos financieros sostenibles y una infraestructura de reciclaje y destrucción. Para aplicar estas recomendaciones, el proyecto apoya actividades de ayuda a la autoayuda y talleres con las partes interesadas. Un componente de cooperación tecnológica también evalúa la capacidad de gestión y destrucción respetuosa con el medio ambiente de los bancos de SAO y apoya la cooperación.
